Conflicto en la selección española entre los jugadores del Real Madrid y el FC Barcelona está cerrado

La selección lo cura todo. Muchos eran los que habían puesto el foco en las relaciones personales de los futbolistas de Barcelona y Real Madrid después de las refriegas vividas en el reguero de clásicos entre ambos esta temporada.

Muchos anunciaban una ruptura total, el fin del buen rollo que siempre ha destilado la 'roja' y que la condujo a ser campeona del mundo. Nada más lejos, los piques, por lo visto, forman parte del pasado. En este grupo prima el interés general. Nada más.

La escenificación de esta reconciliación tuvo lugar en Las Rozas (Madrid), donde España se concentró para preparar los dos próximos partidos amistosos ante Estados Unidos y Venezuela (4 y 7 de junio).

El madridista Sergio Ramos fue el primero en sentar las bases: "Es el momento de pensar en lo que hemos logrado juntos y olvidarnos de las peleas, enfrentamientos y lo dicho durante esos días. No creo que haga falta reunirnos ni hablar nada, sólo pensar que lo que ocurrió en el terreno de juego, ahí se queda". Dicho está.

Zanjado

Reina, por si acaso, se encargó de recordar que la selección no es sólo Real Madrid y Barcelona, y que España está por encima de todos: "Vamos a dejar el tema de una vez. Está zanjado y aquí estamos muchos jugadores para seguir por el buen camino".

En el mismo sentido se expresó el jugador del Athletic Fernando Llorente:_"No tenemos que hacer de intermediarios. No creo que existan problemas. Además, todos jugamos por España. Estamos juntos en esto".

Faltaba por dar su punto de vista un jugador del Barça, y no defraudó. Villa, protagonista junto a Arbeloa de un encontronazo que levantó mucho revuelo, no pudo ser más contundente: "Ya le dimos carpetazo a este conflicto. Es una cuestión a la que se le ha dado mucho bombo desde fuera, pero ya está cerrada".

Vicente del Bosque, por lo tanto, no tendrá que recurrir a su mano izquierda para reconducir un asunto por el que ha confesado en algún momento estar "preocupado". Los internacionales, desde luego, han estado a la altura y no han dejado que el interés personal por defender a sus clubes haya empañado el interés general de la selección. España puede estar tranquila.(adn.es)