Cristiano Ronaldo le ganó a Lionel Messi en la Final de la Copa del Rey 2011

Con un gol de cabeza del portugués en el primer tiempo suplementario el conjunto blanco venció 1 a 0 a los azulgranas, que contaron con "La Pulga" y Mascherano como titulares. Di María fue expulsado en los dirigidos por Mourinho. Es la primera final que pierde Guardiola como DT.

Mucho se habló sobre los cuatro clásicos Barcelona-Real Madrid en menos de 20 días, y luego del primer choque por la Liga de España, que terminó empatado 1 a 1, la final por la Copa del Rey dejó a un nuevo campeó.

Los diarios españoles no dejaron un dato sin tocar y durante los días anteriores al derby: fueron muchos los que removieron la historia, hablaron de estadísticas, marcaron las diferencias entre ambos clubes y, por sobre todo, se hicieron eco de las declaraciones de los jugadores.

No fueron pocos los que mostraban al choque de hoy como un partido separado del resto, porque debía haber un ganador luego de los 90 minutos de juego y ese ganador fue el Madrid.

La primera chance del encuentro fue para el Real y salió de los pies de Cristiano Ronaldo, que recibió un pase de Mesut Özil y definió cruzado, pero encontró bien parados a los defensores rivales, quienes nuevamente se lucieron y despejaron el balón.

Luego de este primer ataque ambos equipos entraron en una nebulosa y sus aproximaciones a los arcos se redujeron considerablemente. El árbitro, Undiano Mallenco, aportó su cuota para que esta situación se concretara y ante cada roce no dudo en cobrar una falta.

El dato curioso llegó sobre el final del primer tiempo: recién después de cuarenta minutos de juego los dirigidos por Pep Guardiola patearon por primera vez a la valla defendida por Iker Casillas, quien, a diferencia de José Manuel Pinto, fue un espectador de lujo.

Cerca del final de la primera etapa, Pepe se convirtió en el centro delantero del equipo blanco, y con un cabezazo preciso estrelló la pelota en el palo derecho del arquero culé y dejó a más de un barcelonista con el corazón en la mano.

Los segundos 45 comenzaron de otra manera y el Barcelona tuvo su primera oportunidad con un disparo desde fuera del área de Pedro. Ese fue el punto de partida para que los azulgranas recuperen la memoria y hagan de la posesión del esférico su arma más letal.

Andrés Iniesta y Xavi Hernández se hicieron "patrones" del mediocampo y sus asistencias elevaron el nivel de todo su equipo. Lionel Messi, por su parte, encontró los espacios y volvió a ser clave con un "pase gol" a Pedrito, que anotó, pero su tanto fue mal anulado por offside, y con un remate bajo que exigió al guardametas de la Selección española.

Ronaldo fue el jugador más claro en los conducidos por José Mourinho. El portugués logró romper la línea defensiva del Barça en varias ocasiones, y luego de tanto insistir marcó la apertura del marcador con un certero cabezazo.

Los últimos instantes fueron igual de vibrantes. Ambos conjuntos no se rindieron nunca y cada avance se transformó en una súplica para los hinchas adversarios. Desde los comentarios de la televisión se escuchó "es una final del Mundial" y, seguramente, para muchos fue más que eso.

"La Pulga" se mantiene como el mejor jugador del mundo, pero en esta oportunidad el ex Manchester United fue decisivo en el triunfo, no sólo por el tanto, sino también porque desplegó su mejor versión y le regresó la alegría a los simpatizantes blancos.
Fuente: infobae.com