Alineaciones del partido amistoso, Italia vs España

Cuatro de Italia y una de España. Las estrellas de los escudos hacen honor al nivel del partido de esta noche (20:45 horas) en Bari. La perspectiva con la que se mira el choque ha cambiado desde la Eurocopa de 2008. Antes del gol de Cesc en Viena, los transalpinos se regodeaban de vencer siempre en partido oficial a una España 'campeona del mundo de los amistosos' (el último ejemplo fue un partido previo a la mencionada Euro, en Elche, donde Villa logró el único tanto). Ahora las piernas no se agarrotan y en Italia se miran a un espejo 'made in Spain'.

Las tornas se han cambiado y, si antes España miraba con recelo a los 'azzurri' (por los triunfos, no por el juego), ahora son los italianos quienes reconocen que hay que aprender del combinado que dirige Vicente del Bosque. Al seleccionador, por cierto, se le acumulan los deberes extradeportivos por culpa de los clubes.

Los clubes quieren 'ahogar' al equipo de Del Bosque

No ha sentado bien a la expedición española en Bari la noticia que comunicó ayer la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE): sus clubes pretenden dejarles de pagar durante los días que estén con la Selección. Falta de tacto con sus estrellas y más tarea para Del Bosque a la hora de mantener al grupo centrado para el partido. Para el salmantino, la única lectura positiva del asunto es que los equipos acaban de motivar un punto de unión entre jugadores del Barça y Madrid.

El seleccionador español no ha terminado de cerrar la herida ocasionada por los clásicos de mayo entre Madrid y Barcelona y ya tiene más trabajo por delante. En una reunión mantenida ayer entre LFP y AFE se propuso que los días que un futbolista esté con la Selección se paralice su contrato o bien cuenten como días de vacaciones. El sindicato de futbolistas se opuso rotundamente y Luis Rubiales (presidente de la AFE) así se lo comunicó a 12 miembros de la Roja, que se quedaron con cara de pocos amigos.

Con la baja de Xavi y Sergio Ramos, aún no se ha podido celebrar la reunión que se acordó entre los futbolistas merengues y culés tras la tensión acumulada en el césped de Camp Nou, Bernabéu y Mestalla. Quizás en el próximo partido oficial, ante Liechtenstein en Logroño el 6 de septiembre, sirva para depurar definitivamente aquellos roces y, quien sabe, si de paso limar también los que se puedan producir durante la Supercopa. Aunque en esta cuestión Del Bosque confía en que “no se den rebrotes de lo sucedido la temporada pasada porque la experiencia les debe servir de algo”.

Alcántara, en su ciudad natal

Mientras los clubes tiran piedras al tejado de Don Vicente, el marqués no duda en afirmar que es "del Madrid y del Barcelona a muerte". Fiel a su modesto estilo ha preparado un encuentro en el que uno de los mayores atractivos será ver a Thiago Alcántara debutar en la ciudad donde nació. La cantera de la Selección continúa dando frutos y el barcelonista es el siguiente. No es un partido fácil para un novato con los precedentes de amistosos ante potencias como Portugal o Argentina (en los que España fue goleada). Monreal, otro de los chicos nuevos (aunque no es primerizo) no parece que vaya a disputar ningún minuto después de su encontronazo fortuito en el entrenamiento de ayer con Fernando Torres.

La humillación de aquellos amistosos está olvidada para los internacionales y el propio Del Bosque asegura que no se volverán a dar. Italia no es el mejor rival para ello pero es a quien España debe parte de su escalada triunfal. El 22 de junio de 2008 una tanda de penaltis cambió el sentido del fútbol para España. Se derribó una barrera psicológica y se dejaron los complejos tras el gol de Cesc. "Desde ese día, hemos dado un giro radical a nuestro fútbol. Nos quitamos la presión y el peso de lo protagonizado años atrás", señaló ayer Casillas en sala de prensa.

Esa noche de domingo, en el Ernst Happel de Viena, donde después logró su primer título en color ante Alemania, España no hizo su mejor partido. Aún sentía fantasmas de un pasado que ahora se siente tan lejano que se ha cambiado por el respeto que encuentra la Roja ante cualquier rival, por grande que sea. Disfrutando de su papel de favorito en el plantea futbolístico. Con esa misma sensación llega a Bari a pesar de bajas tan importantes como Puyol, Sergio Ramos o Xavi. Tres titulares indiscutibles que dejarán su puesto a Albiol, Iraola y Silva.

Italia, en busca de la personalidad perdida ante España

Se enfrentan los dos últimos campeones del mundo, uno que tiene sello propio y otro que intenta buscar su identidad, una "personalidad propia", como exige su seleccionador, Cesare Prandelli.

Prandelli seguirá apostando por un combinado que aúna veteranos de la 'azzurra' como Gianluigi Buffon o Andrea Pirlo, con jugadores jóvenes como los defensas Andrea Ranocchia o Christian Maggio. Además, ha llamado al delantero y "enfant terrible" del 'calcio' Mario Balotelli, con quien ha querido dar por cerrados pasados desencuentros, y a un viejo conocido, Antonio Cassano, “un fenómeno al que le ha perdido la cabeza”, comentó ayer Casillas de su ex compañero.(elconfidencial.com)

Alineaciones probables

Italia: Buffon; Maggio, Ranocchia, Chiellini, Criscito; De Rossi, Pirlo, Montolivo; Aquillani; Rossi y Cassano.
España: Casillas; Arbeloa, Piqué, Raúl Albiol, Iraola; Busquets, Xabi Alonso; Iniesta; Silva, Villa; y Pedro.

Árbitro: Felix Brych (Ale).
Estadio: San Nicola.
Hora: 20.45 horas.