Relación entre José Mourinho y Cristiano Ronaldo en su peor momento, juego defensivo parece tener molesto a CR7

Cristiano Ronaldo considera que el fútbol ultradefensivo de Mourinho está perjudicándole.

La derrota en la ida de las semifinales de la Champions y la pobre imagen que ofreció el Real Madrid han puesto de relieve que las relaciones entre los dos buques insignia del enésimo proyecto galáctico de Florentino Pérez, los portugueses José Mourinho y Cristiano Ronaldo, no son tan idílicas como muchos podían suponer. Al concluir el partido el extremo luso admitió abiertamente que está hasta el gorro de la racanería futbolística que su compatriota ha propuesto hasta ahora en todos los duelos ante el Barcelona, lo que puede desembocar en un divorcio total cuando concluya la presente temporada.

“No me gusta jugar así, pero me tengo que adaptar a lo que me piden”. Cristiano Ronaldo no se mordió la lengua al concluir el primer asalto de las semifinales. Su malestar es consecuencia de la pésima imagen que el Madrid ha ofrecido hasta ahora. El crack madridista considera que su cotización futbolística y comercial se está viendo afectada por el discreto papel de su equipo y cree que a la larga la situación puede incluso hacerle perder dinero.

Cristiano ha empezado a comprender que por el camino que propone Mourinho no conseguirá los títulos que ambiciona y que se tendrá que conformar con premios de carácter secundario como la Copa conquistada en Mestalla. Ni siquiera el técnico portugués es capaz de frenar el dominio blaugrana. Él fichó por el Madrid para reinar en Europa y ni siquiera ha podido conquistar, si todo transcurre como se prevé, una Liga en sus dos primeras temporadas en el Santiago Bernabéu.

Impotente, Cristiano ha visto además que el valor de Messi sigue multiplicándose tras actuaciones como la del pasado miércoles y eso le molesta. Y el principal responsable, opina, es su entrenador.
Hasta ahora había defendido a capa y espada a Mourinho porque vislumbraba que el Madrid podía alcanzar la final de la Liga de Campeones, su gran obsesión, pero el 0-2 ha truncado todas sus esperanzas. La filosofía ultradefensiva del técnico choca frontalmente con sus intereses particulares, porque le impide brillar. Todo el mundo se dio cuenta de su frustración el pasado miércoles viéndole bracear de impotencia reclamando a sus compañeros que le ayudaran a presionar. Era la imagen de la impotencia.

El extremo portugués es intocable para Florentino Pérez, pero el jugador no está dispuesto a seguir soportando la presión de verse por detrás del Barcelona. Tiene sobre la mesa ofertas muy importantes de Italia e Inglaterra, aunque de momento no ha movido ficha. A final de temporada puede replantearse su situación en el Madrid. Por ahora, la bomba no ha explotado porque tanto Mourinho como Cristiano comparten representante, el todopoderoso Jorge Mendes, que es el primer interesado en calmar los ánimos. Pero Cristiano ya fue capaz en su día de forzar al Manchester United que le abriese las puertas y le permitiese fichar por el Real Madrid. Y puede volver a repetirlo.
Fuente: sport.es