El luso y el catalán protagonizaron una dura batalla durante el carrusel de Clásicos de la pasada temporada.
Vuelven los Clásicos. El empacho de Real Madrid-Barcelona de la pasada temporada, cuatro en 20 días, dos de 'Champions League', uno de Liga y uno más de Copa, dejó exhaustos a todos, jugadores y entrenadores incluidos. Ellos, los técnicos, fueron protagonistas de aquellos duelos.
"Guardiola es un fantástico entrenador de fútbol pero ha ganado una 'Champions' que a mí me daría vergüenza ganar con el escándalo de Stamford Bridge. Y este año, si la gana, será con el escándalo del Bernabéu", lanzó un enfurecido Mourinho tras la ida de las semifinales de 'Champions' (0-2). El portugués cargó contra su 'colega' del Barça, al que acusó de gozar de favores arbitrales. "Guardiola merece ganar una 'Champions' dentro de la normalidad. Le respeto mucho como entrenador y persona, le deseo que un día tenga el placer de ganar una 'Champions' blanca, sin incidentes por detrás".
Estas declaraciones las hizo 'Mou' después del partido en el Bernabéu, pero antes también dedicó unas palabras a Guardiola. "En su primera temporada como entrenador él vive el escándalo de Stamford Bridge, y a partir de ése momento no está contento con el acierto de los árbitros. Pierde contra el Inter a pesar de jugar más de una hora contra diez, contra el Arsenal pasó lo que pasó y en la final de Copa el asistente tiene una decisión correctísima y dificilísima pero para él no es correcto".
El luso decidió apuntar a Guardiola para calentar un partido que no necesitaba más llamas. Buscó a Guardiola y lo encontró. El catalán, muy lejos de su conducta habitual, replicó a Mourinho mirándole directamente a los ojos. "Fuera del campo ya me ha ganado. Le regalo su 'Champions' particular fuera del campo, que la disfrute y que se la lleve a casa. En esta sala él es el puto jefe, el puto amo y no quiero competir en ningún instante. Sólo le recuerdo que hemos estado juntos cuatro años". Fue la respuesta airada de un inusual Guardiola.
Mucho más tranquilos han sido los días previos a este primer partido oficial de la temporada para los dos 'grandes'. Ni una palabra más alta que otra. Quizás tanto Mourinho como Guardiola hayan pensado que es demasiado pronto para quemar las balas que tienen que durar toda una temporada.(cadenaser.com)